El precio medio de la vivienda en España aumentó un 34% durante los últimos diez años. Esto es, una cifra diez puntos superior a lo que se ha revalorizado el salario medio en el territorio nacional durante el mismo periodo, según detalla el último informe presentado por Pisos.com. 

"La pérdida de poder adquisitivo de una gran parte de la sociedad, así como la dificultad de acceso a una vivienda en propiedad, son dos de los grandes problemas del mercado inmobiliario actual", detalla el portal en el informe que ha publicado esta mañana. 

Así, en marzo de 2014, el precio del metro cuadrado se situaba en 1.658 euros de media a nivel nacional, o lo que es lo mismo, un 34,56% menos que el mismo mes de este año (2.231€). 

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Si hace una década sólo había tres comunidades autónomas donde el metro cuadrado superaba los 2.000 euros -País Vasco (2.879€/m2), Baleares (2.172€/m2) y Madrid (2.143€/m2)-, actualmente ya son 6 las comunidades autónomas que sobrepasan de lejos esta cifra, entre las que destacan Baleares (4.268€/m2), Madrid (4.020€/m2), País Vasco (3.119€/m2) y Cataluña (2.758€/m2).

"Los datos son muy claros y muestran una clara tendencia alcista en el nivel de precios de la vivienda en la última década, que se extiende de forma más o menos regular por todo el territorio nacional, con especial énfasis en zonas de alta demanda como el País Vasco, Madrid, Cataluña o las Islas Baleares", revela el director de Estudios de pisos.com, Ferran Font. 

De acuerdo con los últimos datos disponibles de la Agencia Tributaria (2022), el salario medio anual en España se sitúa en los 22.781 euros, solo un 23,68% más que hace una década (18.420€), o, en otras palabras, una subida 11 puntos inferior a la del precio de la vivienda.

Una de las principales consecuencias que ha tenido esta situación es el repunte de la tasa de esfuerzo para pagar la vivienda. Esto es el porcentaje del salario que una persona destina al pago de los gastos relacionados a su casa (hipoteca, alquiler, luz, gas, comunidad, etc).

Los expertos recomiendan que esta ratio esté por debajo del 30%, lo que se conoce como umbral máximo. En España, casi la mitad provincias ya está por encima del 25%. 

"Esta tendencia ha mermado mucho a un segmento concreto de la población española, que se ha visto completamente expulsado del mercado de la compraventa para llegar a un mercado del alquiler con un nivel de precios elevado que reduce, todavía más, su poder adquisitivo", señala Font.